La poca credibilidad del tipo de gobierno de Honduras es conocida alrededor del mundo, no es extraño que actúen contra los mas necesitados, ni que violen cualquier tipo de ley que beneficie a pueblos enteros.
En la zona sur de Honduras podríamos decir que es donde vive la gente más desposeída y necesitada en nuestro país, por lo tanto, es población que necesita en demasía atención del estado, velar por que sus derechos se cumplan.
Fyffes es una de las transnacionales que opera en la zona sur y tiene muchos años explotando una población desposeída y desprotegida, creando un clima de pobreza y necesidad para que cada madre soltera, padre o abuelo/a se someta a las pésimas condiciones que da dicha transnacional a través de sus subsidiarias SURAGROH y Melon Export S.A.
Por esfuerzo sindicales esta empresa se encuentra denunciada en la Queja Laboral contra Honduras en el marco del Capitulo XVI de Tratado de Libre Comercio (RD-CAFTA), esta expulsada de la Iniciativa de Comercio Ético (ETI) y es reconocida en la OIT como una de las empresas más violadoras de los derechos laborales en uno de los países mas violadores de derechos laborales en el mundo.
Por parte del estado esta empresa ha recibido protección, anulando actas de la misma Secretaria de Trabajo para que no le sean aplicadas multas y desvirtuar denuncias internacionales, se les han acomodado representantes de la Inspectoría de Trabajo y otros han sido amenazados o degradados de sus puestos y se han tenido un proceso lento y no muy transparente sobre 93 demandas interpuestas contra esta transnacional.
Desgraciadamente la influencia política en un país tan pobre esta por encima de cualquier derecho o ley nacional o internacional, solamente fue necesario que la gerencia local de Fyffes en Honduras visitara casa presidencial para que iniciaran los estancamientos en los procesos legales llevados a cabo por el STAS y sus afiliados y afiliadas de las empresas de dicha transnacional.
En resumen; la combinación entre el descreditado gobierno de Honduras y la señalada transnacional Fyffes/SUMITOMO busca destruir derechos vitales como:
- Derecho a Sindicalizarse
- Derecho a Negociar Colectivamente
- Estabilidad Laboral
- Salario Mínimo
- Decimotercer y Decimocuarto Mes
- Derecho a la Salud
- Vacaciones
- Pagos de Derechos Adquiridos, entre otros.
Claro, este no es un hecho aislado, pero si emblemático, existen procesos organizativos del STAS en rubros como caña, banano y palma donde la intervención del estado ha sido nefasta, favoreciendo por sobre la ley a las empresas o estancando los procesos legales que lleva a cabo el sindicato para darle tiempo a las empresas que consoliden sus procesos antisindicales.
Cuando se tiene un gobierno antisindical, el resultado son niveles altísimos de pobreza y corrupción que motivan la migración masiva de trabajadores hacia otros países donde puedan sostener a sus familias y crear condiciones de vida para hu