“Sintrainagro ha logrado grandes avances pero falta mayor participación de la mujer”

Clara crió sola a su hijo y a otros cuatro de su hermana fallecida.

Su hijo se recibió de abogado y todos sus sobrinos estudian. “Lo pude hacer porque existe el Sindicato, porque está Sintrainagro”, dictamina Clara, que ha sido varias veces electa concejala en el municipio de Carepa, uno de los cuatro que conforman el eje bananero de Urabá, que concentra aproximadamente 34 mil hectáreas de cultivos de esta fruta.

-Sientes orgullo de pertenecer a Sintrainagro, ¿no es así?
-Por supuesto. Sintrainagro le ha cambiado la cara al trabajador bananero en Urabá. Hace 38 años, cuando mi madre y mi padre trabajaban en las fincas, empezaban a las 4 de la mañana y a las 10 de la noche todavía estaban en la empacadora y no había quién los defendiera.

A mi madre la despidieron por incapacidad física, después de años y años de trabajo.

-Tú eres una sobreviviente, incluso de la violencia…
-A los 13 entré al Sindicato y en los años noventa quisieron exterminarnos. Yo estaba en el asentamiento de La Chinita (Barrio Obrero), en Apartadó, la noche del 23 de enero de 1994, cuando integrantes de las FARC entraron para matar a los desmovilizados del Ejército Popular de Liberación en momentos en que la gente bailaba despreocupada.

Asesinaron a 35 personas. En aquel entonces yo era parte de la junta del barrio, donde además de los desmovilizados de la guerrilla habían ocupado esas tierras los trabajadores y trabajadoras desplazados de las fincas bananeras.

Hoy la violencia no ha quedado atrás totalmente, pero estamos muchísimo mejor. Antes nadie quería ser parte del Sindicato porque a los sindicalistas los asesinaban sin ningún problema. Uno salía de la casa y no sabía si iba a regresar.

Ahora las cosas han cambiado, gracias en gran parte a la propia lucha de Sintrainagro, que se mantuvo firme.

-Desde distintas tribunas siempre reclamas una mayor participación de las mujeres en el Sindicato.
-Sí, eso es una materia pendiente. Tiene que haber más participación de las mujeres.

Sobre todo tiene que haber más en las directivas. Queremos que las mujeres sean no sólo afiliadas sino también que entren en las direcciones locales y nacionales, y estamos trabajando en esa dirección con todos los compañeros y compañeras.